La leche, los huevos y la carne son los alimentos que más suben en la cesta de la compra

La cesta de la compra está experimentando una constante subida en los últimos meses, lo que dificulta la compra de alimentos más saludables. En concreto, la leche, los huevos y la carne de vacuno son los alimentos que más se han encarecido, especialmente en su fase de producción, según un estudio elaborado por la Autoridad Vasca de la Competencia (LEA/AVC).

El periodo de inflación ha tenido especial relevancia entre enero de 2021 y agosto de 2023, "reduciendo el poder adquisitivo de los consumidores, y forzándolos, en el mejor de los casos, a modificar sus patrones de consumo hacia productos más asequibles o de menor calidad y, en el peor, dificultándoles el acceso a una alimentación saludable y equilibrada", según sostiene este organismo.

El alza en el precio de los alimentos oscila entre un 18 y un 50 % en Euskadi en los últimos tres años. En cualquier caso, Competencia no detecta "comportamientos anticompetitivos" en la subida de precios.

Destaca el fuerte incremento del precio de la leche, casi un 50 % más cara, así como los huevos, que se han encarecido un 42 %. El estudio destaca que se trata de "cifras similares, pero ligeramente inferiores a lo observado en el conjunto de España", si bien dificultan el acceso de los consumidores vascos a los productos más saludables.

En general, 2022 ha sido el año en el que más incremento ha habido, debido en gran parte al aumento en los precios de las materias primas y en la energía causados por el inicio de la guerra en Ucrania, que ha sido la causa principal de la subida.

En concreto, el producto que registra un mayor incremento en el periodo analizado es la leche, hasta un 49,5 %. Le siguen de cerca el de los huevos, en un 42 %, y a más distancia el de la carne de vacuno, en un 23,2 %, el pan en un 19 % y la carne de ave en un 18,9 %. El que registra un menor incremento es el pescado fresco y congelado, situado en el 18,2 %.               

En cuanto a 2023, según la LEA/AVC recoge que en la mayoría de los casos se ha ralentizado la tendencia inflacionaria con una estabilización, e incluso descenso de los precios de algunos productos, aunque la charcutería o la leche han continuado subiendo.