Ares no descarta que Iñigo muriera por un pelotazo de la Ertzaintza

El consejero de Interior del Gobierno Vasco, Rodolfo Ares, ha mantenido hoy que todas las hipótesis siguen abiertas en la investigación de la muerte del aficionado del Athletic Iñigo Cabacas.

En ese sentido, Ares ha señalado que "nunca hemos descartado" que la muerte haya sido provocada por un pelotazo de la Ertzaintza, como aseguran los amigos y familiares de la víctima, aunque ha añadido que "la investigación está abierta". Ha agregado que serán la autopsia y la investigación, que también analiza una porra extensible encontrada en el lugar, las que determinen el objeto que le causó las lesiones.

En una comparecencia desde la comisaría de Erandio, el consejero ha señalado que si se confirma que la muerte fue provocada por una pelotazo "se depurarán responsabilidades", aunque no ha aclarado en qué sentido. Ares ha prometido esclarecer la muerte del joven, de manera que llevará "la investigación hasta el final cueste lo que cueste". El consejero ha mostrado su "profundo pesar" por el fallecimiento ayer del joven. La Ertzaintza ha abierto una investigación para determinar si las heridas fueron causadas por el lanzamiento de una pelota de goma por parte de los agentes o se produjeron en otras circunstancias, y el consejero ha adelantado hoy que si se confirma que fue por una pelota de goma "se asumirán las responsabilidades" dentro de la policía vasca. El consejero ha asegurado que los incidentes que se produjeron en la madrugada del jueves tras el partido fueron "muy graves" y en ellos hubo varios heridos más, entre ellos tres ertzainas.

En todo momento Ares ha afirmado que los ertzainas sufrieron un "ataque permanente" por parte de "personas violentas" por lo que realizaron una salva de disparos para, mas tarde, lanzar pelotas de gomas con el objetivo de disover a los violentos y prestar ayuda a dos heridos.

Ares ha concretado que la familia contará con acceso a toda la información, incluso a la investigación que desarrolla la Policía vasca. En caso de que así lo deseen, los familiares del joven deberán designar un representante.

Por otra parte, ante las peticiones de dimisión que por este caso le ha efectuado la izquierda abertzale, el consejero les ha acusado de "carroñerismo político". Ha indicado que no va a responder "ejemplos tan claros de carroñerismo político de nadie, y menos de aquellos que han dado cobertura a la violencia".