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Cataluña
Puigdemont pone en suspenso los efectos de la independencia para dialogar
El president de la Generalitat ha planteado suspender temporalmente los efectos de la declaración de independencia para abrir una puerta al diálogo.
Agencias | Redacción
Euskaraz irakurri: Puigdemontek independentziaren ondorioak etetea erabaki du, hitz egiteko
El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, afirmó que asume el "mandato del pueblo" para que "Cataluña se convierta en un estado independiente en forma de república", pero a continuación propuso "suspender los efectos de la declaración de independencia" para abrir la puerta al diálogo.
En su comparecencia ante el pleno del Parlament, en un discurso de cerca de media hora, Puigdemont evitó optar por la vía más directa a la independencia, en un intento de "desescalar la tensión" con el Estado, un "gesto de generosidad y responsabilidad" con el que espera "abrir un tiempo de diálogo con el Estado español".
"Asumo presentarles los resultados del referéndum ante todos ustedes y ante nuestros conciudadanos, el mandato del pueblo para que Cataluña se convierta en un estado independiente en forma de república", dijo un ovacionado Puigdemont.
No obstante, acto seguido, añadió: "Con la misma solemnidad el Govern y yo proponemos que el Parlament suspenda los efectos de la declaración de independencia para que en las próximas semanas se emprenda el diálogo".
En su discurso, Puigdemont repasó el proceso catalán desde la sentencia del Tribunal Constitucional contra el estatuto de autonomía y criticó las cargas policiales del pasado 1 de octubre, que aseguró que quedarán "grabadas en la memoria por siempre" de los catalanes.
"No somos unos delincuentes, no somos locos, no somos golpistas, no somos abducidos. Somos gente normal que pide poder votar. Y que ha estado dispuesta a todo el dialogo necesario para realizarlo de manera acordada. No tenemos nada contra España o los españoles, al contrario, nos queremos reentender mejor, porque la relación no funciona. La Constitución es un marco democrático, pero hay democracia más allá de la Constitución", señaló dirigiéndose a la sociedad española.
JxSí y la CUP firman la declaración de independencia
El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont; su Govern; la presidenta del Parlament, Carme Forcadell; y los diputados de JxSí y de la CUP han firmado este martes por la noche en la Cámara catalana una "declaración de los representantes de Cataluña" con la voluntad de una futura independencia.
"Constituimos la república catalana, como Estado independiente y soberano, de derecho, democrático y social. Disponemos de la entrada en vigor de la Ley de transitoriedad jurídica y fundacional de la República", recoge en el texto de la declaración, cuyo texto definitivo tiene el membrete de la Generalitat y se titula "Declaración de los representantes de Cataluña".
El Gobierno español acusa a Puigdemont de "imponer una mediación" sin "volver a la legalidad"
La vicepresidente del Gobierno español, Soraya Sáenz de Santamaría, cargó duramente este martes contra Puigdemont por querer "imponer una mediación" ante la crisis abierta en Cataluña sin "volver a la legalidad". Según recalcó, el diálogo debe producirse dentro de la ley y respetando las reglas del juego.
Sáenz de Santamaría acusó al president de haber sumido a Cataluña en "su mayor nivel de incertidumbre", con un discurso de alguien que "no sabe dónde está, a dónde va ni con quién quiere ir".
La CUP considera imposible dialogar con el Gobierno español
La diputada de la CUP en el Parlament Anna Gabriel advirtió de que no piensan renunciar a la república catalana, y criticó el discurso de Puigdemont: "No podemos suspender la voluntad de dos millones" de catalanes que votaron 'sí' el 1-O.
"Ni nosotros ni mucha gente vamos a renunciar. No hay derrota que valga. Estamos dispuestos a defender la república catalana. En el nombre de las personas que llevan un nuevo mundo en el corazón, seguiremos luchando por la república", sentenció Gabriel.
Gabriel consideró que no se pueden suspender los efectos de la independencia, y menos en virtud de una negociación y una mediación con el Gobierno español: "¿Negociación con quién? ¿Con el Estado que sigue persiguiéndonos y amenazándonos, que despliega sin vergüenza cuerpos policiales y militares, y que azuza a la ultraderecha y nos niega derechos?".
Gabriel argumentó que la proclamación de la república catalana sería además una "herramienta de negociación" para conseguir un diálogo de igual a igual con el Estado, pero avisó de que solo se puede dialogar con un interlocutor que reconoce derechos, incluido el de autodeterminación.
Por su parte, el presidente de JxSí en el Parlament, Lluís Corominas, reclamó a PSC y SíQueESPot que se sumen a la apuesta por la mediación hecha por Puigdemont.
"La mediación parece que es un buen camino. El diálogo. Todos los que dicen que tienden la mano si dialogamos, PSC y SíQueEsPot, esperemos que estén a nuestro lado", sostuvo en su intervención.
También remarcó que quieren mediación "sobre todo para que el Gobierno haga política, y deje de utilizar la violencia judicial y policial para actuar contra Cataluña", tras mostrarse muy crítico con las cargas policiales el día del referéndum.
La oposicón acusa a Puigdemont de ambigüedad
La líder de Ciudadanos, Inés Arrimadas, acusó a Puigdemont de poner "en riesgo la autonomía" catalana y al Parlament con su proceso hacia la independencia de Cataluña. Asimismo, señaló que el president ha realizado una declaración de independencia a plazos.
"Una declaración de independencia suspendida, en diferido, sigue siendo una DUI a plazos", y afirmó que esta declaración se estaba buscando por el Govern desde el inicio al margen de un referéndum que ella considera que no reconoce ningún líder político en la UE.
Para la líder de la oposición en Cataluña, la mayoría de catalanes se sienten catalanes, españoles y europeos: "No sé cómo tiene de grande el corazón. En el nuestro caben las tres identidades y alguna más. No vamos a permitir que usted nos rompa el corazón".
Por otra parte, el primer secretario del PSC, Miquel Iceta, pidió a Puigdemont dejar claro que el Parlament no ha declarado la independencia y que, por tanto, no es posible pedir que se suspendan los efectos de tal decisión.
En su intervención, Iceta aseguró que la comparecencia de Puigdemont fue muy ambigua porque "no se puede suspender una declaración que no se ha hecho", y alertó de que el aplazamiento 'sine die' de la declaración de independencia de Cataluña solo ahonda la incertidumbre entre los catalanes y las empresas, según él.
También dijo que la votación del 1 de octubre no fue un referéndum y que del resultado no puede desprenderse un mandado democrático de los ciudadanos: "El 38,47 % no es el pueblo de Cataluña y una minoría no puede imponerse a la mayoría", repitió en varios idiomas.
El presidente del PP catalán, Xavier García Albiol, afirmó que en ningún caso habrá independencia de Cataluña “por mucho que el presidente de la Generalitat juegue al despiste”.
Albiol destacó que "ya no valen ambigüedades ni juegos de piruetas semánticas porque el Estado de derecho no va a permitir ningún estado independiente en forma de república ni por etapas ni en diferido".
El líder del PP declaró que la comparecencia de Puigdemont fue muy ambigua y que "no ha quedado muy claro" lo que quiso decir con la suspensión de una declaración de independencia, pero advirtió de que en ningún caso el Estado español hablará de "cómo romper la soberanía nacional ni de cómo separar Cataluña del resto de España".
El presidente de SíQueEsPot en el Parlament, Lluís Rabell, se mostró satisfecho con el hecho de que Carles Puigdemont haya planteado suspender unas semanas la voluntad de que Cataluña sea un Estado, porque lo considera una "oportunidad" para dialogar con el Gobierno español.
Rabell reclamó al Ejecutivo de Mariano Rajoy que no aplique el artículo 155 de la Constitución ni una medida que suponga la intervención del autogobierno de Cataluña, y alertó de que "no hay salida de vencedores y vencidos".
Además, defendió que la salida para la situación entre Cataluña y el resto de España es el diálogo y, en el futuro, un referéndum pactado y con garantías: "Es la hora de la valentía, y la valentía hoy quiere decir diálogo".