Se intensifica la violencia en Siria

La violencia generada por el poder en Siria se está intensificando en las últimas jornadas. Mientras los rebeldes intentan destruir el régimen de Al Assad, este último se niega a darse por vencido y sigue reprimiendo a los rebeldes.

En ese sentido, los rebeldes sirios han atacado este jueves la comisaría de Policía más grande de Damasco, según ha informado un testigo, un ataque que llega un día después del atentado que acabó con la vida de tres altos cargos de la cúpula militar en un atentado con bomba.

"El intercambio de disparos ha sido intenso. Las calles alrededor de la comisaría están vacías", ha indicado un residente del barrio de Qanawat en conversación telefónica con Reuters.

El ministro de Defensa, Daud Rajha, y el viceministro de Defensa y cuñado del presidente Bashar al Assad, Assef Shawkat, murieron en un atentado con bomba durante una reunión del gabinete de Seguridad Nacional.

Más de 200 muertos

Más de doscientas personas murieron ayer jueves en Siria, la mayoría en Damasco y su periferia, por la represión de las fuerzas gubernamentales, denunciaron hoy los grupos de la oposición.

La Comisión General de la Revolución Siria situó la cifra total de fallecidos en 222, mientras que el Observatorio Sirio de Derechos Humanos indicó que fueron 206 y los Comités de Coordinación Local los cifró en 217.

20.000 sirios han cruzado la frontera

Alrededor de 20.000 ciudadanos sirios han cruzado en las últimas 24 horas la frontera con Líbano, según han informado fuentes de seguridad fronteriza libanesas. Habitualmente, esta cifra ronda las 5.000 personas diarias.

Esta misma fuente ha señalado que entre las personas que han cruzado la frontera hay varios diplomáticos y trabajadores de organizaciones humanitarias, aunque no ha dado más detalles al respecto.