Internacional -
Drama de la migración
Miles de migrantes esperan entrar en Grecia, animados por Turquía
Denuncian que la Policía turca les intenta convencer de que traten de pasar la frontera; cuando llegan la griega usa la fuerza para impedírselo.
EFE
Euskaraz irakurri: Milaka migratzaile Greziara sartzeko ahaleginetan ari dira, Turkiak xaxatuta
Varios miles de personas han pasado la noche en los alrededores de la ciudad turca de Edirne esperando para poder cruzar la cercana frontera con Grecia, atrapados entre la Policía turca, que les anima a intentarlo, y la griega, que usa la fuerza para impedírselo.
Numerosos refugiados sirios han declarado a EFE que, una vez llegados de Estambul y otras ciudades turcas, ya no tienen permiso para volver, pues las autoridades turcas únicamente les permiten abordar vehículos que los acerquen a la frontera.
"Nos intentan convencer diciéndonos que nos llevarán a un punto de la frontera sin vigilancia, pero ya estuvimos ayer allí y sabemos que no es verdad: la Policía griega no deja pasar a nadie y nos lanza gas lacrimógeno", ha dicho a la agencia un sirio oriundo de Alepo que se ha identificado como Mohamed.
"Ayer estuve con un grupo de cientos de personas, entre ellas familias y niños, en la valla. Desde el frente nos lanzaban gas y detrás, la policía turca nos impedía retroceder. Estuvimos 15 horas atrapados", relata el refugiado.
Turquía los anima a cruzar la frontera
Autobuses, que nadie sabe quién ha fletado, van distribuyendo a los migrantes en pequeños grupos a lo largo de unos 25 kilómetros de frontera.
Mohamed y varios de sus compañeros aseguran que la policía turca los lleva a pueblos aislados, donde los esperan traficantes que les prometen ayudarlos a cruzar el río Evros, que hace de frontera, previo pago de 50 euros. Asevera que Turquía va registrando a esos migrantes cómo si ya hubieran pasado a Grecia.
Las autoridades turcas distribuyeron ayer infladas cifras de que más de 100.000 personas habían logrado cruzar, pese a que las autoridades griegas han indicado que apenas 100 personas habían sido detenidas en las últimas horas tras entrar en suelo griego.
Mientras siguen difundiéndose bulos sobre una inminente apertura de la frontera o anuncios de que Grecia dejará entrar a pequeños grupos, las autoridades griegas han enviado un sms a todos los móviles internacionales próximos a la frontera en los que advierte de que el paso no está abierto y de que se detendrá a quien trate de entrar ilegalmente en el país.
Varios refugiados acampados en Edirne (Turquía). Foto: EFE
Grecia, que ha suspendido durante un mes el derecho de los refugiados a solicitar asilo, incumpliendo la legislación internacional, ha recurrido al lanzamiento de gases lacrimógenos, granadas aturdidoras y cañones de agua para bloquear la entrada de los migrantes. Hungría también ha dejado de aceptar peticiones de asilo.
Además, ha habido episodios de violencia por parte de quienes esperan en la frontera, con algunos migrantes lanzando piedras a la Policía griega.
También desde el mar: Un niño fallecido en las últimas horas
Entretanto, un niño ha fallecido y otras 47 personas han sido rescatados en una operación de la Guardia Costera griega frente a la isla de Lesbos, uno de los principales puntos de entrada en la Unión Europea para las pateras que parten desde Turquía.
Dos menores fueron trasladados a un hospital de Lesbos. Uno de ello fue evacuado inconsciente y terminó falleciendo, mientras que el otro está fuera de peligro, según la Guardia Costera.