Internacional -
Congreso de los 'tories'
May dice que el Reino Unido no tiene miedo a un 'brexit' sin acuerdo
La primera ministra británica ha dicho que su Gobierno respetará el resultado del referéndum de 2016 pero ha insistido en que no está dispuesta a aceptar cualquier acuerdo con el bloque europeo.
Agencias | Redacción
Euskaraz irakurri: Erresuma Batuak ez dio beldurrik akordiorik gabeko 'brexit'ari, Mayren esanetan
La primera ministra británica, Theresa May, ha afirmado hoy que el Reino Unido "no tiene miedo" de marcharse de la Unión Europea (UE) sin un acuerdo del "brexit" y ha resaltado la importancia de mantener una buena relación con Europa.
En su discurso ante el congreso anual del Partido Conservador, que se celebra en Birmingham, May ha dicho que su Gobierno respetará el resultado del referéndum de junio de 2016, en el que los británicos votaron por el "brexit", pero ha insitido en que no está dispuesta a aceptar cualquier acuerdo con el bloque europeo.
La primera ministra ha reiterado que su Gobierno ha tratado a la UE con "respeto" y que espera que el bloque de los 27 "haga lo mismo" con el Reino Unido.
La líder "tory" ha subrayado que quiere un buen pacto con Bruselas, pero ha reconocido que, si no es posible, esto supondría "un mal resultado para el Reino Unido y la UE".
"Será duro al principio", pero "la resistencia" del pueblo británico permitirá que el país salga adelante, ha avenurado.
La política conservadora ha defendido su plan del "brexit", conocido como "Chequers", que permitirá comerciar sobre productos y no servicios entre ambas partes al tiempo que protegerá lo que ha calificado como "nuestra preciada unión" -en alusión a las cuatro naciones: Inglaterra, Escocia, Gales e Irlanda del Norte-, sin que haya un cambio en la frontera entre las dos Irlandas.
Ha criticado además a los políticos que piden un segundo referéndum sobre la UE al insistir en que el Reino Unido ya tuvo un plebiscito, en el que la gente pidió salir del bloque.
En su opinión, una segunda consulta, como piden diputados de la oposición laborista, representaría "un voto de los políticos" que buscan un resultado distinto.