Internacional -
EE. UU.
El Supremo de Florida anula la pena de muerte de Pablo Ibar
El alto tribunal ordena repetir el juicio. El preso de origen vasco lleva casi 22 años en la cárcel, 15 de ellos en el corredor de la muerte.
eitb.eus
Euskaraz irakurri: Floridako Gorenak baliogabe utzi du Pablo Ibarren heriotza zigorra
El Tribunal Supremo de Florida (EE. UU.) ha anulado la sentencia de muerte dictada en el año 2000 contra el estadounidense de origen vasco Pablo Ibar, que lleva casi 22 años en prisión, 15 de ellos en el corredor de la muerte.
El dictamen emitido por la máxima instancia judicial de Florida implica la celebración de un nuevo juicio contra Ibar, condenado por el triple asesinato de tres personas, cometido en 1994, un crimen por el que siempre se ha declarado inocente.
En un comunicado, la Asociación contra la Pena de Muerte Pablo Ibar ha destacado que con esta decisión "por fin se abre el camino a que Ibar pueda demostrar su inocencia".
La asociación ha recordado que ni las huellas dactilares, ni el ADN recogido en el lugar del crimen coinciden con las de Ibar y que su acusación se basa principalmente en un vídeo de vídeovigilancia en el que "se ve un rostro difuminado con ínfima resolución y fuertes contrastes lumínicos". Además, añade que no tuvo una defensa eficaz.
En todo caso, esta plataforma ha explicado que la decisión judicial no es definitiva, ya que el Estado de Florida puede aún apelarla, algo que ve "muy probable", bien en recurso de reposición ante el propio Tribunal Supremo de Florida, bien incluso ante el Tribunal Supremo de los Estados Unidos.
Con cuatro votos a favor y tres en contra, el Supremo de Florida se ha pronunciado en contra de la condena por asesinato en primer grado y sentencia de muerte "ante la ausencia de pruebas físicas que conecten a Ibar con el triple asesinato".
Uno de los argumentos de peso examinados por el tribunal es que el "ADN de Ibar no fue encontrado en la camiseta recuperada" en el lugar del triple crimen y con la que el asesino usó para "cubrirse parcialmente el rostro".
La esposa de Ibar, Tania Quiñones, se ha mostrado emocionada y en declaraciones a ETB ha afirmado que "no hemos ganado la guerra, pero esta batalla era fundamental". Pablo y Tania contrajeron matrimonio después del primer juicio, cuando él ya estaba en prisión.
Por su parte, Andrés Krakenberger, portavoz de la Asociación Pablo Ibar, ha instado a "mantenernos fríos y serenos" hasta que se resuelva el posible recurso que presente el Estado de Florida. Eso sí, ha celebrado que "ahora son ellos quienes nadan a contracorriente; siempre hemos sido nosotros".
Documetal de ETB: "Pablo Ibar, un vasco en el corredor de la muerte"
22 años de lucha
Ibar fue condenado a muerte por un triple asesinato, que niega haber cometido.
A finales de junio de 1994, la Policía entró en un domicilio de la localidad de Mirarmar, en el Estado de Florida, y halló los cuerpos sin vida del propietario de la casa, Casimir Sucharski, dueño de un local nocturno, y dos de sus bailarinas, Sharon Anderson y Marie Rodgers.
La investigación culminó en la acusación formulada el 25 de Agosto de 1994 contra Seth Peñalver y Pablo Ibar.
El primer juicio contra los dos acusados se celebró en Fort Lauderdale, Florida, el 5 de mayo de 1997, y fue declarado nulo el 25 de enero de 1998 al no ponerse de acuerdo el jurado sobre un veredicto en el caso.
El 11 de enero de 1999 se inició un segundo juicio. Durante la fase de selección del jurado, el abogado de oficio asignado a Ibar fue detenido acusado de agredir a una mujer embarazada en un incidente de violencia doméstica. El acusado presentó una moción de cese del abogado, que fue denegada por el tribunal, y otra moción solicitando un aplazamiento del juicio, que fue aprobada. El juicio de Seth Peñalver continuó y fue condenado a muerte.
El tercer juicio a Pablo Ibar dio comienzo el 17 de abril de 2000, y el jurado lo declaró culpable el 14 de junio. 10 días después, se anunció la condena a muerte de Ibar.
¿Es este hombre Pablo Ibar? Las fotos en las que se basa la acusación
"Tania nunca me ha dejado, en 20 años"
Pablo Ibar, en una entrevista realizada por Mikel Reparaz en junio de 2014, relataba respecto a su mujer, Tania Ibar, que eran una pareja normal antes de su detención y juicio, pero " desde que me pasó esto, que ella sabía que era inocente, nunca me ha dejado, estamos hablando de 20 años. Para mí es mi corazón, la quiero con todo mi alma".
"Es difícil (mantener una relación), porque solamente la puedo ver una vez por semana y, si ella no puede venir, no la veo. A veces he intentado a empujarla a que se vaya, que siga con su vida, porque yo creo que ella se merece una vida mejor, pero ella no se quiere ir, me quiere con locura".
"Hasta en mis sueños estoy preso"
El preso de origen vasco describía cómo a veces sueña que está libre, "que estoy con Tania y con mi familia, pero le digo a Tania: oye, tengo que regresar, que me van a contar. Hasta en mis sueños estoy preso".
Preguntado por cómo es la vida en el corredor de la muerte, Ibar explicaba que "todos los días es lo mismo. Comes tu desayuno, no te dan carne, no te dan leche, no te dan fruta? Y vivo en una celda de 2x3 metros, puedo hablar con mi vecino, tengo uno a la izquierda y otro a la derecha, pero no los puedo ver".
"Es difícil tener una amistad aquí dentro porque nunca sabes cuándo le van a llamar y va a ser su turno. Puedo escuchar música, leer? pero todos los días son lo mismo, todos los días hago lo mismo", señalaba Ibar.
Hijo de emigrantes vascos
Sobrino del mítico y malogrado boxeador vasco José Manuel Ibar, Urtain, Pablo Ibar nació en 1972 en Fort Lauderdale, Florida (EE. UU.).
Su padre, Cándido Ibar Aspiazu, emigró a Estados Unidos, donde se ganó la vida como pilotari, actividad que también practicó su hijo Pablo en los frontones Jai-Alai de Florida.
El Gobierno español concedió la nacionalidad española a Pablo Ibar el 27 de diciembre de 2001.