Exigirán la huella digital a los trabajadores y usuarios de Lanbide

El Gobierno Vasco exigirá a los trabajadores y usuarios de Lanbide que se identifiquen mediante el sistema de huella digital y creará un grupo antifraude con el objetivo de mejorar la gestión y evitar las irregularidades en la percepción de las ayudas sociales que concede este organismo. Según ha reconocido la consejera de Empleo y Políticas Sociales, Beatriz Artolazabal, los casos de fraude o uso inadecuado de estas prestaciones (Renta de Garantía de Ingresos ?RGI? y Prestación Complementaria de Vivienda ?PCV?) suponen menos de un uno por ciento de los casos que se revisaron en 2016.

La consejera ha reivindicado el sistema vasco de protección social como factor decisivo para la "cohesión" e instrumento para "paliar" las situaciones de pobreza en la comunidad autónoma, y ha recordado que la RGI ha evitado que más de 130.000 personas caigan en una situación de exclusión social por la falta de ingresos.

La consejera Artolazabal ha dado a conocer las medidas destinadas a mejorar la gestión de las ayudas sociales en una rueda de prensa en Vitoria-Gasteiz.

La medida más llamativa de las anunciadas por Artolazabal es la exigencia de la huella digital a todos los trabajadores y usuarios del Servicio Vasco de Empleo-Lanbide. La huella digital es un sistema que identifica a las personas a través del reconocimiento de sus huellas dactilares mediante un escáner. Este sistema ya se utiliza en otras administraciones y en algunas empresas privadas.

La implantación de este sistema será progresiva y se iniciará en una oficina piloto de Lanbide a partir del próximo mes de junio. La gestión de esta herramienta correrá a cargo de Izenpe, sociedad pública del Gobierno Vasco encargada de servicios de firma electrónica.

Otra de las medidas dadas a conocer es que Lanbide revisará permanentemente el procedimiento de trabajo y el modelo de actuación interno de la gestión de la RGI y la PCV, analizando entre otros factores la carga de trabajo en las oficinas locales, la atención que se le da a los expedientes en cada fase.

Además, el Servicio Vasco de Empleo creará un protocolo de actuación ante agresiones que puedan sufrir miembros del personal.